Recientemente
me acordé de unos libros muy entretenidos de cuando era peque. Se
trata de esos en los que había que buscar a cierto personaje vestido
a rayas, con gafas, gorro y bastón llamado Wally. He aquí el
primero de esa serie, llamado ¿Dónde está Wally?, de Martin
Handford.
Título:
¿Dónde está Wally? (Where is Wally?, que acabó rebautizándose a
Where is Waldo?)
Autor:
Martin Handford
Año
de publicación: 1987 (1989 en España)
Número
de páginas: 28
ISBN:
8440601441
Género:
Infantil, juegos
SINOPSIS:
Wally
es uno entre la multitud, pero donde esté tienen que encontrarle.
¿Por qué? Porque está ahí, porque se llama Wally, porque el
nombre del juego es “¿Dónde está Wally?” Búsquelo en la
playa, en la estación, en el camping, en el estadio, donde quiera
que haya muchedumbre, ahí está Wally, incansable, pasando
desapercibido por entre la gente.
El
libro está formado por 12 imágenes grandes, a dos páginas cada
una, donde hay que buscar a Wally.
Wally
va a partir a un viaje, como suele hacer, por los distintos sitios
típicos que se suelen visitar en vacaciones. Comienza en su barrio,
donde lo tienes que encontrar, para seguir por la playa, la estación
de esquí, un partido de fútbol o un museo. En los distintos
lugares, siempre repletos de gente, habrá que ir buscándolo por
todos los rincones, siempre vestido con su famoso atuendo de camiseta
y gorro a rayas rojas y blancas, gafas y bastón. Además, una vez
finalizada esta primera búsqueda, en cada uno de los paisajes podrás
buscar a otros personajes que te indican al final del libro.
Estos
libros nos encantaban a todos los niños de pequeños. Los íbamos
pasando de mano en mano para buscar a Wally sin que nadie nos ayudara
y a los mayores también les gustaba. De hecho, si cae uno de estos
en mis manos vuelvo a buscar a Wally entre la multitud.
Un
juego divertidísimo que gustaría también mucho a los peques de
ahora.
También
recuerdo una serie de dibujos sobre Wally y sus aventuras donde, de
vez en cuando, paraban la imagen para que buscáramos a Wally en la
televisión. ¡Oh, bendita nostalgia!
Y
aquí os dejo un pasaje de Wally en la playa para que lo busquéis y
vayáis abriendo boca para desempolvar vuestros viejos libros de
Wally.
Lo
mejor: De vez en cuando se puede volver a buscar a Wally en
los viejos libros y volver a disfrutar con él.
Lo
peor: Siempre se hacían demasiado corto.
Con estos libros no sé quien se distraía más, si mi hija o yo...
ResponderEliminarBesotes!!!
Huy, se lo trajeron los reyes un año a mi hermano y nos divertimos un montón^^
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