viernes, 10 de mayo de 2013

Reseña: LA FORTALEZA DIGITAL (DAN BROWN)

La fortaleza digital fue la primera novela que escribió el escritor Dan Brown. En esta ocasión trata de criptografía. Es el comienzo del tipo de literatura al que nos tiene acostumbrados el autor. Está ambientada en EEUU y en España, aunque no nos deja nada bien parados. A continuación, comentaré las lindezas que este hombre opina de nuestro país.



Título: La fortaleza digital
Autor: Dan Brown
Año de publicación: 1998
Número de páginas: 448
ISBN: 9788489367012
Género: Thriller




SINOPSIS:
Susan Fletcher, la criptógrafa estrella de la ultra secreta Agencia de Seguridad Nacional (NSA) no puede dar crédito a sus oídos cuando su jefe, el subdirector de la Agencia, le informa de que han interceptado un código que ni siquiera la mayor supercomputadora conocida puede descifrar. La única pista para romper el letal código parece estar oculta en el cadáver de un hombre que ha fallecido en España, donde ha sido enviado David, el prometido de Susan.

Este libro está narrado como acostumbra Dan Brown, con capítulos muy cortos en los que la historia va pasando de un personaje a otro. Ésta, está situada en EEUU y en España.

La historia comienza cuando la criptógrafa de la NSA Susan Fletcher tiene que posponer su fin de semana con su novio David Becker. Su jefe, Trevor Strathmore, le llama urgentemente para que vaya a Criptografía, ya que han encontrado un código, llamado Fortaleza Digital, que la supercomputadora Trans no puede descifrar. Mientras tanto, David Becker, sin el conocimiento de Susan, ha sido enviado a Sevilla para que consiga la clave de acceso a dicho código, pues éste ha sido programado por Ensei Tankado, antiguo miembro de la NSA, cuyo cadáver se halla en la morgue en Sevilla, donde ha muerto.

El libro está entretenido, se lee fácil y rápido, aunque, lamentablemente, no le llega ni a la suela de los zapatos a El código Da Vinci ni a Ángeles y Demonios.

El gran problema de este libro, para nosotros que somos españoles, es la mala ambientación de Sevilla que se hace. Se ofrece una imagen casi tercermundista de la ciudad. Supuestamente, Dan Brown estuvo de estudiante en la Universidad de Sevilla y por eso conoce la ciudad. A dicha universidad, este supuesto alumno no les consta. A continuación, haré un recopilatorio de las mayores burradas que he encontrado:

[Peligro SPOILER on]
  • Empieza diciendo que el zumo de arándanos es muy común en Sevilla. Yo creo que la mayoría de los españoles, ni tan siquiera lo hemos probado. Bien podían haber puesto cerveza, un vino fino o manzanilla sevillano o aunque sea mosto. Pero, ¿zumo de arándanos?
  • Luego, nos cuentan que en la Catedral de Sevilla tienen una reliquia que consiste en el escroto de Colón. Como lo oyen. Nada más y nada menos que su escroto. Y nosotros sin saberlo. La iglesia guarda bastantes reliquias pero, ¡vaya, nada parecido a esto!
  • También, resulta que en España, por lo visto, de criptografía no tenemos ni idea. Tendré que contarle esto a mi amiga con un doctorado en tal rama de las matemáticas.
  • Aparece un personaje que es llevado a un hospital o algo similar como paquete en la moto de un policía. Y a este policía, como es muy patoso, el enfermo se le cae de la moto y, con las prisas, lo deja allí tirado y no se para ni a recogerlo. Todo un despropósito de principio a fin. Ni un policía llevaría a un enfermo de paquete en una motocicleta ni lo dejaría por ahí tirado. Absurdo.
  • Y ni hablar de como describe el supuesto hospital. Lo llama Clínica de Salud Pública y era un antiguo colegio reconvertido. Dice que es oscuro, ruidoso y sucio. Que la sala de espera consiste en unas cuantas sillas plegables, que el mostrador de información se identifica por un cartel de cartón donde pone OFICINA, y que parece de una película de terror. Con los recortes andamos mal, pero aún no hemos llegado a estos extremos.
  • También nos cuenta el señor Brown que aquí, normalmente, las gitanas tienen el pelo rojo. Sí, España se caracteriza porque la mayoría somos pelirrojos. Eso de la mujer morena que pintó Julio Romero de Torres le habría venido bien a este señor para retratarnos mejor.
  • Los autobuses ya son poco menos que una caja con ruedas. Según este hombre, en Sevilla, para evitar usar el aire acondicionado, los autobuses viajan con las ventanas y puertas abiertas de par en par. Posiblemente, el señor Brown crea que nuestros autobuses son así:
  • ¿Y los baños? Ahora en los baños de señoras había urinarios en lugar de retretes, pues estos solían permanecer cerrados. ¿Se imaginan ustedes como va a hacer pis una señora en un urinario? Ni pies ni cabeza. Por no hablar de lo sumamente asquerosos que describe los baños del aeropuerto, que no suelen estar para nada sucios.
  • Tampoco describe nada bien la Giralda. Ni las medidas coinciden, ni existe tal escalera.
  • Las comunicaciones en nuestro país también parecen ser malas. Una llamada internacional imposible de realizar. Se ve que seguimos comunicándonos con señales de humo y con teléfonos fabricados con yogures e hilo.
  • La mala fama de corrupción se ve que ya la teníamos desde hace años. Describe el cuerpo de la Guardia Civil como corrupto y putero.
  • Y para rematar la explicación del catolicismo en España y las misas. Según dice, a la hora de la misa, todo el mundo va cual marabunta hacia la iglesia. Ríos de gente que colapsan las iglesias tanto que no te puedes ni mover. ¡Ni en los mejores sueños de Rouco! Además, la gente va toda de negro, con sus velos y sus chaquetas. Se ve que este hombre vio un entierro en Semana Santa y se hizo un lío. Además, los españoles somos los raros del catolicismo en el mundo, pues ahora resulta que en las misas la comunión se toma al empezar en vez de al terminar. Además, el botafumeiro ahora no está en la catedral de Santiago de Compostela, sino que se encuentra en la Giralda. En serio, este hombre ha oído campanas y no sabe donde.
Si consigues obviar este sinfín de despropósitos, la historia no está mal. Aunque, para los que sepan un mínimo de criptografía o de física, la resolución final les parecerá pobre y poco creíble para unos supuestos expertos. Tardan demasiado tiempo en averiguar el mensaje final. Mensaje fácil y tonto donde los haya. El peor de todo el libro.
[Peligro SPOILER off]

Puntuación: 2/5

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6 comentarios:

  1. No lo conocía, pero me ha llamado la atención, quizás me haga con él y lo lea.
    Te sigo por aquí, nos leemos! :)

    Javier Del Álamo

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    Respuestas
    1. ¡Gracias por seguirme! Es curioso la visión que tienen de nosotros en otros países. Quizá nosotros también estemos igual de equivocados en la visión que tenemos de otros.

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  2. Hola! Me acabo de leer el libro y aunque sí se pasó un poco con lo de Sevilla, me gustó bastante. La historia es correlativa, nunca te deja sin acción y la cantidad de información aunque es bastante contundente, es entregada con determinación y de a poco, para no ahogarte. Aunque me pareció que algunas partes eran predecibles, ya que en sus obras Dan Brown siempre repite el mismo patrón, me gustó muchísimo y aún así estuve en constante suspenso. Una buena novela para divertirse un rato ;D
    ¡Besos! esa es mi opinión. Gracias por la reseña, me quedo en tu blog.
    desde: http://se-trata-de-libros.blogspot.com/

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  3. He enlazado tu entrada en mi crítica del libro, por si te interesa saberlo.

    http://lasmalashierbasnuncamueren.blogspot.com/2015/10/la-fortaleza-digital-de-dan-brown.html


    Con amorr,

    O.

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  4. Una basura de novela, es aburrida, en la parte que se desarrolla en Sevilla el escritor demuestra no tener ni idea de dónde está Sevilla, la describe como una ciudad tercermundista de algún país sudamericano o africano donde todo es suciedad llena de drogadictos y prostitutas, donde los centros de salud son barracones infectos con olor a orines, el escritor demuestra un odio ridiculo a España, dice que su capacidad sanitaria es prácticamente el de una tribu africana, narra que la única policía que hay es una guardia civil corrupta que se dedican a pasear a turistas con sus motos, un insulto vamos, solo le hubiera faltado que hiciese mención de la quema de sus fallas o la suelta de toros por las calles como en cierta película del Tom Cruise.
    Patético el Dan Brown

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